La estación más divertida del año viene con un pequeño manual de instrucciones. Hoy compartimos algunos consejos para disfrutar el verano sin golpes de calor ni deshidrataciones. ¡Tomá nota!

Agua, agua y más agua: La mayor parte de nuestro cuerpo está compuesta de agua y mantener esa proporción es indispensable para el buen funcionamiento de nuestro organismo. En verano es importante tomar agua aunque no sientas sed. Agua pura y fresquita, jugos, licuados, helados de agua y mucha fruta fresca te ayudarán a mantenerte correctamente hidratado todo el verano.

Estrellas de la temporada: Aprovechá para disfrutar todo lo que la naturaleza tiene para darte: Frutas y verduras frescas y en comidas de todo tipo, licuados, jugos y helados. Es bueno para vos y para el medio ambiente, ya que las frutas y verduras de estación llevan menos insumos químicos y se producen cerca de tu casa, o sea que no usan transportes que contaminen el aire.

Respetá los horarios de comidas: Cada comida es importante para tu nutrición, por eso es importante respetar los horarios de desayuno, almuerzo, merienda y cena aunque en las vacaciones estemos más relajados con las obligaciones. Y sobre todo, nunca te olvides de hacer un completísimo desayuno con lácteos, cereales, frutas e hidratos de carbono para tener mucha energía.

Comidas sanas a toda hora: Para tener una buena digestión a pesar del calor te recomendamos optar siempre por comidas bajas en grasas y cocinadas a la plancha, al vapor o a la cacerola. Y recordemos que el verano es la temporada ideal para disfrutar de los más ricos asados a la parrilla.

Helados contra el calor: Las altas temperaturas se combaten con bajas temperaturas en tu cuerpo. Aprovechá para disfrutar los más ricos helados. En tu casa podés hacer vos mismo paletas en base a jugos de frutas, licuados, gelatinas, etc. Hace poco en la sección Pequeños Chefs publicamos una receta de helados deliciosa. ¡Animate!